El Paris Saint-Germain goleó 5 a 0 al Inter de Milán en el Allianz Arena por la final de la UEFA Champions League 2025. Con goles de Hakimi, Doué (x2), Kvaratskhelia y Mayulu, el equipo de Luis Enrique alcanzó su primera Champions League en la historia, y cerró la temporada con un triplete inolvidable.
El partido fue un monólogo parisino. El Inter intentó imponer condiciones con su experiencia en este tipo de instancias, pero se vio completamente superado desde el primer minuto. A los 12 de la primera mitad, Khvicha Kvaratskhelia, Fabián Ruiz, Vitinha y Désiré Doué, generaron una jugada perfectamente coordinada que dejó a Achraf Hakimi solo frente al arco para definir y romper el cero en el marcador. Nueve minutos después, Doué, la joven revelación del PSG, estiró la ventaja con un disparo colocado tras una gran jugada colectiva.
Con el 2-0, el PSG no bajó el ritmo. El Inter buscó salir del fondo, pero ni Barella ni Çalhanoğlu lograron hacerse dueños del mediocampo. Lautaro Martínez estuvo aislado y sin contacto con el balón, junto a Marcus Thuram que tuvo una mala actuación. Mientras tanto, el equipo francés continuó presionando alto, moviendo la pelota con fluidez y encontrando espacios entre líneas.

En el complemento, Doué volvió a aparecer con una diagonal letal y puso el 3-0 a los 63’, liquidando el partido mucho antes del pitazo final. Diez minutos más tarde, Kvaratskhelia anotó el cuarto con un zurdazo al primer palo. Y para cerrar la noche, el juvenil Senny Mayulu, de apenas 19 años, firmó el 5-0 definitivo a los 87 minutos, redondeando una actuación memorable.
“Hemos entrado muy bien al partido, hemos gestionado bien toda la semana de entrenos, intentando buscar un estado que nos permitiera no estar demasiado por encima del nivel y el equipo ha sido excepcional.
Hemos presionado a un equipo del nivel del Inter con una intensidad altisima”, explicó Luis Enrique en conferencia de prensa sobre cuales fueron las claves de la victoria.
Con esta victoria, el PSG no solo conquistó su primera Orejona, sino que además se convirtió en el primer equipo francés en lograr un triplete en la era moderna: Champions League, Ligue 1 y Copa de Francia. Un logro que le escapa incluso al histórico Olympique de Marsella campeón en 1993. Además de ser la única final de Champions de la historia en finalizar con 5 goles de diferencia.
Del otro lado, el conjunto de Simone Inzaghi nunca encontró el partido. El equipo italiano, que llegaba con un paso muy firme en la competencia, estuvo completamente desconectado y sin respuesta ante la intensidad del París. La zaga defensiva Pavard-Bastoni–Acerbi fue ampliamente superada por la movilidad de los atacantes parisinos, y Sommer, el arquero suizo, evitó que la diferencia fuese aún mayor.
Además de los goles, hubo puntos altos por todos lados: Vitinha dominó el mediocampo, Marquinhos junto a Pacho fueron un baluarte en defensa y Dembélé desbordó constantemente por banda derecha y corrió por toda la cancha sin mostrar cansancio. Pero quien se llevó todos los flashes fue Doué, elegido como el jugador del partido por su doblete, asistencia, y su despliegue técnico, firmando uno de los mejores rendimientos de la historia en una final de esta categoría.

El equipo parisino, muchas veces criticado por su falta de identidad en Europa, encontró finalmente el camino. Con un equipo renovado, sin figuras estelares como Mbappé, Neymar, o Messi, apostó al juego colectivo, a la intensidad, y a la solidez táctica. La apuesta tardó en salir a favor, con el nuevo formato del torneo pasaron en el decimoquinto puesto, pero demostraron que el proyecto dio sus frutos y lograron coronar los tres trofeos.
En París, los festejos comenzaron desde temprano, pero no todo fue alegría: hubo disturbios, incidentes aislados y decenas de detenidos en los alrededores de los Campos Elíseos. Sin embargo, la capital francesa pudo celebrar una hazaña que parecía imposible años atrás.

La consagración en Múnich cambia la historia del club. Tras la derrota en la final del año 2020, ante el equipo oriundo de tal ciudad, el Bayern Munich, sumado a años de frustraciones y caídas en instancias decisivas, el PSG rompió el maleficio europeo y se inscribe, por fin, en la lista de campeones del continente.
Mientras tanto, el Inter deberá barajar y dar de nuevo. Tras dejar que se escape esta final y perder la oportunidad de coronar en la Serie A, deberá mantenerse muy fuerte mentalmente y Pipo, en caso de seguir, tendrá que saber afrontar esta situación junto a sus jugadores.